miércoles, 7 de mayo de 2008

El síntoma como regalo



El fin de semana del 26 de abril tuvimos el gustazo de participar en el taller que realizó Michelle Ritterman (situada en el centro de la foto, en los laterales Chomin y yo, creadores del blog) en Madrid en el Instituto Erickson. Discípula directa de Erickson nos narró muchas anécdotas de él, entre ellas una que consistió en la primera pregunta que le realizó éste cuando la vió por primera vez: "¿Qué es para tí la psicoterapia?", y me gustaría por unos momentos que todo el que lea este blog se haga esta pregunta en silencio y encuentre su respuesta... Erickson contestó sabiamente: "En la psicoterapia el terapeuta no cambia nada ni nadie, crea las circunstancias, crea un ambiente, una atmósfera, un contexto donde la persona se sienta libre para actuar, para responder de forma espontánea, y automáticamente el cambio se hará posible".


Nos narró muchas anécdotas de su vida e incluso hubo momentos en los que nos emocionó y como buena discípula de Erickson también nos aportó algo novedoso, algo de ella misma: la hipnosis en la terapia familiar.


La hipnosis es como una lente con la que podemos ver el mundo entero, decía Michelle, y el hipnotista puede ser la sociedad, la familia, el maestro y un sinfín de personas más de todas las que nos rodean y no simplemente el hipnoterapeuta. La hipnosis es una herramienta y al igual que un martillo podemos darle dos tipos de usos, lo podemos utilizar para construir una casa o romper la cabeza a alguien.


Nos enseñó a ver cómo a veces estamos atrapados en un estado mental, un estado de trance negativo que se autoperpetua constantemente y la importancia de tener control sobre los mensajes inconscientes que continuamente recibimos y aceptar lo que nos sea útil y rechazar lo inútil, lo que nos perjudica, lo que nos hace daño.


Nos habló del trance compartido en la pareja, del proceso hipnótico en la relación, de la escucha con el oído de la "hipnosis", del oir las sugestiones que se dicen y del comprender los dos tipos de lenguaje que se utilizan tanto en una pareja como en cualquier tipo de relación que nos hace sufrir, el superficial a nivel consciente y el que cuesta a veces más ver, el inconsciente.


Y por último nos habló del "síntoma como regalo", cada cliente nos trae algo que le gustaría cambiar de él mismo o algo que le viene impuesto desde afuera como una etiqueta diagnóstica y sin embargo Michelle lo describe como un regalo para el terapeuta, cuando nos regalan algo nunca lo arrebatamos, es la otra persona la que libremente nos lo da... con frecuencia la gente da lo que más adora, o lo que quiere o lo que necesita...la espera es parte del respeto...y sólo cuando está preparada la persona es capaz de acercárnoslo y ponérnoslo en las manos... pero también nosotros podemos admirarlo antes de abrirlo desde todos los ángulos antes de decidir a aceptarlo...también está nuestra libertad... la de querer abrirlo.


Bueno Chomin, dedicado para tí y por tu agradable insistencia de escribir el artículo, un beso.

3 comentarios:

EVA dijo...

Me ha encantado leer el artículo, poco sé sobre la imnosis más allá de lo que he leído de Brian Weiss y poco más, pero tu artículo me ha abierto el apetito...

Muchas gracias Maria Antonia.

Besos

Mª Antonia dijo...

Hola Eva, muchas gracias por realizar el comentario, anímate a leer el blog y a compartirlo con gente que conoces y descubrirás un montón de posibilidades a tu alcance gracias a la hipnosis. Besos.

David dijo...

Veo que Eva estaba bajo Hipnosis IMNÓTICA, :D

Se lo tengo que decir. Maria Antonia me quedo con lo de la lente, con la que podemos ver el mundo entero.

Yo lo estoy intentando a través de los sueños pero me cuesta muchísimo.

Gracias por el post.

Un abrazo